Ansiedad por separación canina
¿Tu perro es un angelito cuando estás en casa pero en cuanto sales por la puerta te la prepara y de las gordas? ¿No para de ladrar y tus vecinos se quejan, hace destrozos tras destrozos, araña las puertas, muerde los muebles, se mea y defeca por doquier, ha desenterrado todas tus macetas y ha dejado su baba por todas tus cosas, etc. y lo peor de todo es que cuando estás tú, se porta como un amor?
Algunos dueños juran que es por venganza, que sus perros lo hacen a posta: como no quiere quedarse solo, se porta mal cuando lo dejo. La realidad puede ser muy distinta, el perro puede sufrir de un trastorno serio llamado ansiedad por separación . No está tratando de castigar o vengarse de su dueño por dejarle solo sino que todas estas conductas destructivas que muestra son debida a una reacción de pánico puro y duro. La ansiedad por separación ocurre cuando un perro siente una angustia desmedida e irracional a ser separado de su dueño. Los destrozos, llantos, ladridos, etc. solo son la manera que tiene el perro de exteriorizar esa angustia e intentar aliviarla. |
El perro no tiene miedo a quedarse solo, lo que lo vuelve loco es el estar separado de su dueño. Esto ocurre cuando el perro está demasiado apegado al él. Es normal que un perro sienta apego a su dueño, el problema radica cuando ese apego se vuelve excesivo.
No se sabe a ciencia cierta qué es lo que provoca ese apego excesivo o dependencia enfermiza de un perro hacia su dueño. Se habla de factores hereditarios o de una inadecuada separación de la madre o un trauma causado por un abandono o maltrato anterior. También puede pasar que el perro no haya aprendido a pasar tiempo solo desde pequeño o que tenga acceso a todas las habitaciones de la casa y vaya siguiéndole siempre por todas partes. Algunos dueños consienten demasiado a sus perros, a menudo para satisfacer sus propias necesidades emocionales.
No se sabe a ciencia cierta qué es lo que provoca ese apego excesivo o dependencia enfermiza de un perro hacia su dueño. Se habla de factores hereditarios o de una inadecuada separación de la madre o un trauma causado por un abandono o maltrato anterior. También puede pasar que el perro no haya aprendido a pasar tiempo solo desde pequeño o que tenga acceso a todas las habitaciones de la casa y vaya siguiéndole siempre por todas partes. Algunos dueños consienten demasiado a sus perros, a menudo para satisfacer sus propias necesidades emocionales.
Tratamiento
Es muy importante que los propietarios comprendan y sigan de manera muy disciplinada las normas sociales caninas. La ventaja de este problema de conducta radica en que realizando correctamente el tratamiento, prácticamente todos los casos se resuelven positivamente.
Para tratar el problema lo mejor sería ponerse en contacto con un especialista en comportamiento, para que diagnostique correctamente el problema y proponga unas pautas a seguir para la modificación de la conducta. Hay que tener en cuenta que a veces puede deberse a otras causas, y quizás debieras ir a consultar al veterinario. Si se trata efectivamente de aniedad por separación, aquí vienen una pautas útiles para solucionar el problema:
Para tratar el problema lo mejor sería ponerse en contacto con un especialista en comportamiento, para que diagnostique correctamente el problema y proponga unas pautas a seguir para la modificación de la conducta. Hay que tener en cuenta que a veces puede deberse a otras causas, y quizás debieras ir a consultar al veterinario. Si se trata efectivamente de aniedad por separación, aquí vienen una pautas útiles para solucionar el problema:
- Enséñale al perro a estar solo, al principio durante intervalos breves y ve aumentando el tiempo según los adelantos del perro.
- Mejoraremos la relación con el dueño a través del control en obediencia, fomentando la relajación a través de las órdenes. Nos ayudará mejorar determinadas situaciones como conseguir aumentar el control sobre la orden de quieto hasta poder dejarle solo fuera de nuestra vista y en otra habitación..
- Cambia las rutinas que sigues antes de salir de casa para que el perro no anticipe tus salidas. Una buena idea también es desensibilizar esas rutinas, es decir, ponte la chaqueta, coge las llaves, ponte las gafas.... pero vuélvete a sentar en el sofá a ver la televisión, así conseguirás desasociar estas conductas a tu partida.
- Ignora al animal un rato antes de marcharte y un rato a la vuelta, si le haces una gran fiesta cuando vuelves estarás justificando su comportamiento. Solo le haremos caso cuando esté tranquilo.
- No se debe permitir que el perro obtenga la atención con exigencia. Siempre que el animal de compañía consigue lo que quiere, cada vez que empuja o gimotea, es más probable que esté ansioso cuando está solo y no pueda conseguir atención social. Los dueños deben saber que pueden prestar al perro la atención que deseen, pero esto debe ser siempre según su criterio, no por exigencia del animal.
- Usa un kong (juguete en el que puedes introducir comida) cuando te vayas, así conseguirás que el perro cree asociaciones agradables con está separado de ti.
- Además, y una de las pautas mas importantes, deberemos darle al animal el ejercicio que precise para dejarlo cansado y así poder disminuir la ansiedad siguiendo todas las pautas anteriores.
Vídeo: Educa2 - La ansiedad por separación
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