BULLMASTIFF
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Aspecto: Relativamente cuadrado, muy compacto y unas patas anteriores fornidas, potentes, paralelas entre sí y otras, las posteriores, de fuerte pierna y angulaciones moderadas que terminan con unos pies fuertes y redondos (pie de gato). La cola es relativamente larga pues alcanza el corvejón, muy ancha en su base aunque luego se estrecha algo hacia la punta. Lo que más llama la atención es su extraordinaria cabeza, compacta, cuadrada, enorme, adornada por un ancho y también cuadrado morro negro y que se apoya en un cuello potente, que a su vez se asienta sobre un pecho ancho e igualmente potente. Todo ello nos habla de la extraordinaria fuerza de este animal.
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Carácter: Este magnífico animal nunca se comportará como un bruto sin cerebro: es inteligente y responsable y sabe controlar hasta dónde llegan sus obligaciones a la hora de mostrarse intimidatorio. Su capacidad de autocontrol no debe hacernos olvidar que se trata de un perro guardián muy protector que defenderá a muerte a cada uno de los miembros de la familia, incluido el gato si fuese necesario. Su valentía y potencial fiereza sólo le sirven de puertas afuera, ya que siente debilidad por jugar con los niños y sabe que su deber fundamental es la lealtad a su propietario. Tiene predisposición para la obediencia y su educación, firme pero constructiva, debe estar encaminada a reforzar esa tendencia. Los cuidados necesarios y buenas dosis de cariño hacen del Bullmastiff un compañero inseparable durante al menos diez largos años. Es aconsejable proveerle ejercicio físico al aire libre diariamente y dedicarle tiempo y juegos con sus dueños.
Necesidades: Se adapta perfectamente a la vida en piso y en ciudad; no es excesivamente activo, aunque agradece los paseos a buen ritmo. Tiene cierta tendencia a la obesidad. No desprende olor corporal y su higiene es sencilla.
Origen: Inglaterra.
Historia: Esta raza fue creada en Gran Bretaña a mediados del siglo XIX para acompañar y ayudar a los guardabosques a luchar contra los furtivos. Antes de darle el nombre de Bullmastiff fue llamado “ Game-Keeper´s Night Dog “ (Perro Vigilante Nocturno de la Caza) para llegar a él se realizaron numerosos cruces entre razas de perros de gran talla, valientes y poderosos (San Bernardo, Dogo Alemán, Sabuesos, etc), pero el cruce que realmente les dio resultado fue el realizado entre el Bulldog y el Mastiff Ingles un perro que pesaba entre 60 y 70 Kg mas parecido al Mastiff que al Bulldog, de capa atigrada (poco visible por la noche) hay que tener en cuenta que los Bulldog y los Mastiff de aquella época se parecían muy poco a los actuales, el Bulldog se parecía mas a un bóxer que a los actuales Bulldog y el Mastiff tenia un tipo muy poco homogéneo, pero con este cruce se obtenían perros mucho más poderosos que los Bulldog aportándoles estos la capacidad de no sentir dolor y de menor tamaño que los Mastiff pero mucho mas vivos, ágiles y bravos (la proporción parece ser que fue de un 60% Mastiff y un 40% Bulldog), aunque es probable que para afinar el olfato se recurriera también al Bloodhound (sabueso de gran olfato) dando como resultado un perro con un aspecto impresionante e indestructible.
A principios del siglo XX debido al gran auge de este cruce, el Kennel Club Britanico decidió registrarlo como cruce con el nombre de Bull-Mastiff, apareciendo en sus pedigrees tanto Bullmastiffs como Mastiffs, pero en esta época el tipo no lo tenían muy bien definido y eran muy poco homogéneos, no es hasta 1924 cuando viendo que ya se ha conseguido una mayor homogeneidad se decide registrar como raza con el nombre de Bullmastiff, todos los ejemplares que no tenían en su pedigree ningún antepasado Bulldog o Mastiff en las tres generaciones anteriores a él. El primer Estandar de la raza fue redactado en 1926 y posteriormente revisado en 1943, 1956 y 1994. En 1928 se otorgaron los primeros Certificados de Campeonato en Exposiciones valederos para el Campeonato Nacional Ingles.
Mr. W. Burton, cuyo Bullmastiff “ Torneywood Terror” participo en multitud de ferias de campo luchando con bozal contra todo aquel que se quería batir a él, proclamándose invencible y ganando todas las apuestas, mantuvo un criadero grande de Bullmastiff posiblemente de los primeros como tal.
Mr. S.E. Moseley (que se dice que es el padre de la raza) con su afijo Farcroft fue el pionero en la raza como tal apareciendo su afijo en todos los pedigrees modernos si los remontáramos a sus inicios, así como su perra Farcroft Silvo que fue la primera en obtener el Titulo de Campeón.
A principios del siglo XX debido al gran auge de este cruce, el Kennel Club Britanico decidió registrarlo como cruce con el nombre de Bull-Mastiff, apareciendo en sus pedigrees tanto Bullmastiffs como Mastiffs, pero en esta época el tipo no lo tenían muy bien definido y eran muy poco homogéneos, no es hasta 1924 cuando viendo que ya se ha conseguido una mayor homogeneidad se decide registrar como raza con el nombre de Bullmastiff, todos los ejemplares que no tenían en su pedigree ningún antepasado Bulldog o Mastiff en las tres generaciones anteriores a él. El primer Estandar de la raza fue redactado en 1926 y posteriormente revisado en 1943, 1956 y 1994. En 1928 se otorgaron los primeros Certificados de Campeonato en Exposiciones valederos para el Campeonato Nacional Ingles.
Mr. W. Burton, cuyo Bullmastiff “ Torneywood Terror” participo en multitud de ferias de campo luchando con bozal contra todo aquel que se quería batir a él, proclamándose invencible y ganando todas las apuestas, mantuvo un criadero grande de Bullmastiff posiblemente de los primeros como tal.
Mr. S.E. Moseley (que se dice que es el padre de la raza) con su afijo Farcroft fue el pionero en la raza como tal apareciendo su afijo en todos los pedigrees modernos si los remontáramos a sus inicios, así como su perra Farcroft Silvo que fue la primera en obtener el Titulo de Campeón.