CATARATAS |
Es cuando se produce una opacidad en el interior del ojo, en el cristalino, que va perdiendo con el tiempo su transparencia convirtiéndose en una sustancia opaca y de color blanco.. Lo normal es que afecte a los dos ojos y evolucione hacia la ceguera.
La visión del perro no es como la nuestra, podríamos decir que en algún aspecto es más rudimentaria o está menos evolucionada que la de los humanos. Por ejemplo, muchos perros son miopes. No ven todos los colores o no tienen la capacidad de acomodación (visión cercana-lejana).
Aunque tenga falta o inexistencia de visión, al tener los sentidos más desarrollados, la suplencia por esta pérdida no le supondrá un “gran” trastorno.
Las cataratas pueden ser congénitas o presentarse cuando el animal es joven o adulto. Hay que tener en cuenta que hoy en día los perros son más longevos de lo que lo eran antaño, llegando entre los 15 y 18 años, por lo que tienen más problemas relacionados con la edad. Posiblemente el perro empezará a manifestar la ceguera cuando carezca al menos del 80% de su capacidad visual por lo que será fácil que podáis apreciar que el perro no ve bien. Pero, salvo algunos cambios de adaptación el animal no manifiesta grandes problemas para continuar con sus rutinas diarias.
Por eso conviene que con frecuencia, les revises los ojos por si tienen algún tipo de inflamación o un color azulado en los ojos. En cualquiera de los dos casos deberemos de llevarlo al veterinario, hoy en día la cirugía de cataratas ha avanzado de manera sorprendente en este campo, aunque debemos saber que no todos los casos serán operados.
La visión del perro no es como la nuestra, podríamos decir que en algún aspecto es más rudimentaria o está menos evolucionada que la de los humanos. Por ejemplo, muchos perros son miopes. No ven todos los colores o no tienen la capacidad de acomodación (visión cercana-lejana).
Aunque tenga falta o inexistencia de visión, al tener los sentidos más desarrollados, la suplencia por esta pérdida no le supondrá un “gran” trastorno.
Las cataratas pueden ser congénitas o presentarse cuando el animal es joven o adulto. Hay que tener en cuenta que hoy en día los perros son más longevos de lo que lo eran antaño, llegando entre los 15 y 18 años, por lo que tienen más problemas relacionados con la edad. Posiblemente el perro empezará a manifestar la ceguera cuando carezca al menos del 80% de su capacidad visual por lo que será fácil que podáis apreciar que el perro no ve bien. Pero, salvo algunos cambios de adaptación el animal no manifiesta grandes problemas para continuar con sus rutinas diarias.
Por eso conviene que con frecuencia, les revises los ojos por si tienen algún tipo de inflamación o un color azulado en los ojos. En cualquiera de los dos casos deberemos de llevarlo al veterinario, hoy en día la cirugía de cataratas ha avanzado de manera sorprendente en este campo, aunque debemos saber que no todos los casos serán operados.