EPILEPSIA
Cuando hablamos de ataque epileptiforme, nos referimos al resultado de una descarga excesiva de un foco de neuronas de la corteza cerebral. Esta descarga supone que las neuronas se despolarizan o transmiten señales eléctricas a sus vecinas, difundiendo así la excitabilidad a la totalidad del cerebro. Si el ataque es generalizado, se presenta pérdida de consciencia, convulsiones, pedaleo, postración, signos motores generalizados... También son comunes signos de hiperactividad del sistema autónomo: dilatación pupilar, salivación, micción, defecación...
Pero cuando hablamos de epilepsia, nos referimos a una enfermedad hereditaria que cursa con convulsiones y no está producida por ninguna causa adicional (hipocalcemia, síncope, problemas motores, enfermedades metabólicas (encefalopatía hepática, fallo renal), tóxicos...
Pero cuando hablamos de epilepsia, nos referimos a una enfermedad hereditaria que cursa con convulsiones y no está producida por ninguna causa adicional (hipocalcemia, síncope, problemas motores, enfermedades metabólicas (encefalopatía hepática, fallo renal), tóxicos...
Tipos
Tenemos crisis parciales, que se dividen en simples y complejas; generalizadas, que pueden ser convulsivas o no convulsivas; o ideopáticas, que se hereda genéticamente. En las parciales simples no hay alteración de la consciencia y se manifiestan contracciones faciales, continuos golpes con una pata o mordisqueos en alguna parte del cuerpo. Las parciales complejas, tendrán una alteración de la consciencia y a menudo comportamientos extraños, como que intente cazar moscas inexistentes, agresiones sin motivo, aullidos incesantes… Se originan en ambos hemisferios cerebrales y son del tipo más frecuente. Como características, habrá una alteración de la consciencia unida a signos motores y puede incluir el desplome del afectado.
Causas
El ataque epiléptico puede estar desencadenado por cambios en la actividad de las neuronas, de los neurotransmisores o por estímulos ambientales como ruidos, emociones visuales, fenómenos atmosféricos (tormentas)...
Síntomas
La epilepsia es una enfermedad de curso progresivo, aumentando generalmente los episodios de convulsiones en duración y frecuencia, especialmente en perros de razas grandes. Los pacientes pueden desarrollar ciertos síntomas derivados de esta patología: pérdida de visión, desplazamiento en círculos, parálisis, desorientación, cambios comportamentales, agresividad...
Tratamiento
Los objetivos del tratamiento son: disminuir la intensidad y frecuencia de aparición de las convulsiones, disminuir las complicaciones consecutivas a los ataques, y aumentar el período de tiempo entre un ataque y el siguiente.
El tratamiento de elección es fenobarbital (luminal) 2 veces al día vía oral. La dosis irá aumentando durante 1 mes hasta alcanzar la concentración terapéutica deseable. Se debe controlar el nivel de fenobarbital en sangre el día 21, el día 45, 3 meses más tarde, y 6 meses más tarde desde la instauración del tratamiento y a partir de ahí habrán controles periódicos cada 6 meses. Si el perro presenta crisis consecutivas, se medirá el nivel de fenobarbital en ese momento sin atender a la pauta antes descrita. Además es conveniente hacer una analítica sanguínea de control a los 45 días y cada 6 meses.
Debéis saber que el fenobarbital es un barbitúrico y tiene efectos secundarios: cambios de comportamiento (letargia, mayor ingesta de agua, mayor eliminación de orina, mayor ingesta de comida...), aumento de peso, aumento de tamaño del hígado así como del bazo, dependencia y tolerancia al fármaco, y hepatotoxicidad. Este fármaco puede administrarse sólo o asociado a otros aunque la tendencia es a administrar de entrada un solo fármaco para evitar acumular efectos adversos de varios medicamentos.
El tratamiento de un cuadro convulsivo en casa se basa en la administración de diazepam (valium) via intranasal o intrarectal. Si en 3-5 minutos no cesa la actividad motora, se repite 2 ó 3 veces la misma operación. Si no va bien se debe acudir al Hospital Veterinario.
El tratamiento de elección es fenobarbital (luminal) 2 veces al día vía oral. La dosis irá aumentando durante 1 mes hasta alcanzar la concentración terapéutica deseable. Se debe controlar el nivel de fenobarbital en sangre el día 21, el día 45, 3 meses más tarde, y 6 meses más tarde desde la instauración del tratamiento y a partir de ahí habrán controles periódicos cada 6 meses. Si el perro presenta crisis consecutivas, se medirá el nivel de fenobarbital en ese momento sin atender a la pauta antes descrita. Además es conveniente hacer una analítica sanguínea de control a los 45 días y cada 6 meses.
Debéis saber que el fenobarbital es un barbitúrico y tiene efectos secundarios: cambios de comportamiento (letargia, mayor ingesta de agua, mayor eliminación de orina, mayor ingesta de comida...), aumento de peso, aumento de tamaño del hígado así como del bazo, dependencia y tolerancia al fármaco, y hepatotoxicidad. Este fármaco puede administrarse sólo o asociado a otros aunque la tendencia es a administrar de entrada un solo fármaco para evitar acumular efectos adversos de varios medicamentos.
El tratamiento de un cuadro convulsivo en casa se basa en la administración de diazepam (valium) via intranasal o intrarectal. Si en 3-5 minutos no cesa la actividad motora, se repite 2 ó 3 veces la misma operación. Si no va bien se debe acudir al Hospital Veterinario.