Socialización del cachorro
El proceso de socialización es muy importante ya que tu perro aprenderá a relacionarse y a llevarse bien con otros animales o personas, o al menos a ignorarlos. La habituación (habituar, tener hábitos) es el proceso por el cual tu perro aprende a ignorar cosas que le rodean que no son peligrosas. De esta forma, un perro habituado a un entorno metropolitano, por ejemplo, no se preocupará por el ruido del tráfico urbano ni por la presencia de muchas personas en las calles. Aunque la socialización y la habituación son dos conceptos diferentes, son sin embargo claves para la educación y socialización del cachorro. La socialización de tu perro es el proceso por el cual el perro se acostumbra a reaccionar de manera adecuada (sin miedo ni agresión) frente a diferentes entornos, personas, otros perros y/u otros animales. |
Esta es la parte más importante en su educación porque es lo que le va a permitir prevenir conductas agresivas y miedosas en el futuro. Además, un perro bien socializado es más fácil de educar y puede ser aceptado con más facilidad por otras personas y animales.
Todo empieza cuando el cachorro es separado de la madre. Es muy importante separar al cachorro de la madre y sus hermanos a los dos meses de edad, y nunca antes. Los cachorros que son separados de su familia antes de las seis semanas no logran desarrollar todas las habilidades sociales y tienden a ser agresivos y/o miedosos en grado extremo.
Si tu perro es mayor de tres meses o incluso adulto y muestra signos de agresión o de miedo exagerado, lo mejor es consultarlo con un especialista que pueda ayudarte personalmente. En cambio, si tu perro es mayor de tres meses o adulto y se lleva bien con otros perros y con las personas, es posible que lo hayas socializado sin darte cuenta. En este caso, sigue socializando a tu perro, aunque nunca te despistes y ten mucho cuidado cuando lo expongas a situaciones nuevas, por ejemplo: niños pequeños, gatos, ruidos fuertes, etc.
Para que los cachorros se desarrollen con normalidad, deberían socializarse con personas y animales varios, y exponerse a tantas experiencias en casa y fuera de ella como sea posible. Los veterinarios no recomiendan sacar a los cachorros a la calle antes de cumplir con el periodo de vacunaciones, pero, es de suma importancia que los cachorros tengan una correcta socialización, caso contrario nos exponemos a futuros problemas de comportamiento.
Una idea es sacar al cachorro por sitios donde seguramente no hayan estado más perros, o controlar que los perros que hayan frecuentado el lugar estén completamente sanos y sin ningún problema de salud. También se les puede sacar en brazos para que entren en contacto con otros perros, otras personas y se habitúen al entorno dónde vayan a convivir.
Todo empieza cuando el cachorro es separado de la madre. Es muy importante separar al cachorro de la madre y sus hermanos a los dos meses de edad, y nunca antes. Los cachorros que son separados de su familia antes de las seis semanas no logran desarrollar todas las habilidades sociales y tienden a ser agresivos y/o miedosos en grado extremo.
Si tu perro es mayor de tres meses o incluso adulto y muestra signos de agresión o de miedo exagerado, lo mejor es consultarlo con un especialista que pueda ayudarte personalmente. En cambio, si tu perro es mayor de tres meses o adulto y se lleva bien con otros perros y con las personas, es posible que lo hayas socializado sin darte cuenta. En este caso, sigue socializando a tu perro, aunque nunca te despistes y ten mucho cuidado cuando lo expongas a situaciones nuevas, por ejemplo: niños pequeños, gatos, ruidos fuertes, etc.
Para que los cachorros se desarrollen con normalidad, deberían socializarse con personas y animales varios, y exponerse a tantas experiencias en casa y fuera de ella como sea posible. Los veterinarios no recomiendan sacar a los cachorros a la calle antes de cumplir con el periodo de vacunaciones, pero, es de suma importancia que los cachorros tengan una correcta socialización, caso contrario nos exponemos a futuros problemas de comportamiento.
Una idea es sacar al cachorro por sitios donde seguramente no hayan estado más perros, o controlar que los perros que hayan frecuentado el lugar estén completamente sanos y sin ningún problema de salud. También se les puede sacar en brazos para que entren en contacto con otros perros, otras personas y se habitúen al entorno dónde vayan a convivir.