Vacunas para perros
Un calendario de vacunas correcto es imprescindible para preservar la salud de nuestro perro. Las vacunas han mejorado su eficacia en los últimos años y su acción mejorada repercute de manera positiva en la calidad de vida del perro. Sin embargo, en algunos casos, las vacunas pueden provocar reacciones graves.
Las principales enfermedades infecciosas contra las que se vacuna son: el moquillo, la parvovirosis, la hepatitis canina, la leptoriosis y la rabia. Sin embargo, no es recomendable vacunar a un animal enfermo, por lo que para evitarlo es recomendable hacer antes un estudio clínico. Otro aspecto a tener en cuenta antes de comenzar con el calendario de vacunaciones es que el perro esté desparasitado. La primera vacuna para las cuatro primeras enfermedades, es recomendable llevarla a cabo antes de las ocho semanas de edad. Hay circunstancias en las que no es recomendable vacunar al animal, como en el caso de que el perro padezca enfermedades infecciosas, alteraciones inmunitarias o alergias. Frente a estas situaciones es mejor consultar con el veterinario, que lo más probable es que opte por retrasar la vacuna. Por ello, antes de vacunar al perro es importante avisar al veterinario si se cree que el animal pueda estar enfermo. |
Re-vacunación
Para conseguir una correcta inmunidad, hay que realizar una segunda, e incluso, en algunas razas, una tercera aplicación de las vacunas en las primeras 15 semanas de edad. Al cabo del año hay que hacer una re-vacunación. Si el riesgo de contagio es muy alto, hay que vacunar al perro anualmente de: leptospirosis, bordetela bronquisética o de parainfluenza canina.
En cuanto a la vacunación contra la rabia depende de la legislación sanitaria de cada país. El veterinario es quien mejor puede aconsejar sobre el calendario de vacunas a seguir. Los perros de más de un año, con el plan de vacunaciones al día, es imposible que contraigan: moquillo, parvorirosis o hepatitis canina. Es recomendable revacunar a los perros de moquillo y hepatitis vírica, durante dos o tres años.
En cuanto a la vacunación contra la rabia depende de la legislación sanitaria de cada país. El veterinario es quien mejor puede aconsejar sobre el calendario de vacunas a seguir. Los perros de más de un año, con el plan de vacunaciones al día, es imposible que contraigan: moquillo, parvorirosis o hepatitis canina. Es recomendable revacunar a los perros de moquillo y hepatitis vírica, durante dos o tres años.
Vacunas en cachorros
A partir de los 45-50 días: Parvovirosis
A partir de los 50-60 días: Trivalente
A partir de los 90 días: Rábia
La vacuna contra la parvovirosis y la trivalente (moquillo, hepatitis vírica y leptospirosis)
se administran en dos dosis cada una, alternándose en intervalos de 15 a 20 días.
A partir de los 50-60 días: Trivalente
A partir de los 90 días: Rábia
La vacuna contra la parvovirosis y la trivalente (moquillo, hepatitis vírica y leptospirosis)
se administran en dos dosis cada una, alternándose en intervalos de 15 a 20 días.
Vacunas en adultos
Revacunación anual contra parvovirosis, trivalente y rábia (recomendado).
Engañar al sistema inmune
Las vacunas consisten en "un engaño" para el sistema inmunitario del animal para conseguir que sus defensas se preparen con antelación frente a los ataques de los virus. De esta manera, si está prevenido y reconoce a las bacterias que provocan la enfermedad, su sistema inmunitario podrá enfrentarse a ellas y ganar la batalla.
El veterinario inocula la vacuna, que hace creer al organismo que ha sido atacado por gérmenes patógenos. Sin embargo el truco consiste en introducir fracciones del virus que son patógenos. De esta manera, el sistema defensivo del perro crea una memoria sobre ellos, que le ayudará a reaccionar con eficacia cuando el organismo del animal entre en contacto con el virus en todo su apogeo.
En principio si la vacunación se retrasa unos días sobre la fecha prevista y el retraso se alargara mucho tiempo, es recomendable consultar al veterinario la posibilidad de cambiar el calendario de vacunaciones.
El veterinario inocula la vacuna, que hace creer al organismo que ha sido atacado por gérmenes patógenos. Sin embargo el truco consiste en introducir fracciones del virus que son patógenos. De esta manera, el sistema defensivo del perro crea una memoria sobre ellos, que le ayudará a reaccionar con eficacia cuando el organismo del animal entre en contacto con el virus en todo su apogeo.
En principio si la vacunación se retrasa unos días sobre la fecha prevista y el retraso se alargara mucho tiempo, es recomendable consultar al veterinario la posibilidad de cambiar el calendario de vacunaciones.
Posibles efectos secundarios
Después de la vacunación pueden aparecer ciertos problemas. El más común es la reacción alérgica, con síntomas como: habones, inflamación, edema de la cara o vómitos. Es debido a que con la vacuna se estimula el sistema inmunitario, que favorece los procesos inflamatorios. Aunque no es habitual, se pueden dar casos de choque o muerte súbita.
Sin embargo, a pesar de estos riesgos, las vacunas son importantes para la salud del perro. Lo más frecuente cuando se produce una reacción frente a la vacuna es que se trate de efectos secundarios de carácter leve y que duran poco tiempo. Las reacciones frente a la vacuna pueden aparecer, de forma inmediata, o bien a las 48 horas de su aplicación.
Sin embargo, a pesar de estos riesgos, las vacunas son importantes para la salud del perro. Lo más frecuente cuando se produce una reacción frente a la vacuna es que se trate de efectos secundarios de carácter leve y que duran poco tiempo. Las reacciones frente a la vacuna pueden aparecer, de forma inmediata, o bien a las 48 horas de su aplicación.
Consejos frente a una reacción alérgica
- Si se observa alguna reacción adversa, consultar con el veterinario. También se puede acudir a un servicio de urgencia. Normalmente, un anti-inflamatorio soluciona el problema.
- Si una vacuna ha provocado problemas, no debe volver a administrarse.
- El período mínimo de margen entre la administración de una vacuna y otra es de 15 días.
- No olvidar llevar la cartilla de vacunaciones a la consulta, que debe ser un centro autorizado.
- Los problemas graves derivados de la aplicación de una vacuna son muy poco frecuentes.
- Para que el calendario de vacunaciones resulte efectivo, deben cumplirse los plazos propuestos y administrar el total de dosis recomendadas, siempre según la supervisión de un veterinario.
Vídeo: Las vacunas
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Vídeo: Cuando hay que vacunar
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